En Página 16 Radio, Carlos María Beigbeder, titular de la Cámara de Comercio e Industria de Posadas (CCIP), habló sobre los próximos aumentos, en los productos básicos, del 10 al 15 por ciento. Anticipó que las empresas los aplicarán en la previa de las elecciones y que «Cuando el dólar suba, volverán a aplicarse aumentos”, sentenció. También habló sobre la política “El estado nunca se achica, se achica el bolsillo del consumidor. El estado está tan grande que sale más de lo que entra”; el trabajo y la pobreza, “Vinieron al país cerca de 2 millones de venezolanos y todos tienen trabajo. Y hay 3 generaciones de “vagos” que no lo tienen y te cortan la calle. Me enferma seguir pagando impuestos para mantener a gente que podría trabajar. Devolvamos los venezolanos y démosle trabajos a los argentinos”, señaló.
¿Se vienen nuevos aumentos de precios en la ciudad de Posadas?
Es así. Se vienen nuevos aumentos que realmente preocupan porque no hay necesidad de aumentar. No hay ningún indicio de que el dólar esté subiendo o de que el combustible subió. Se podría decir que este nuevo aumento es “por las dudas”. El industrial argentino hace estas cosas “por las dudas” pero si no sucede nada, igual no retroceden con el aumento.
¿Cuál es su visión sobre estos aumentos con respecto al consumo?
Es muy perjudicial para el consumidor. Hoy por hoy no tienen de donde sacar para comprar y va perdiendo capacidad de compra y es preocupante porque si llega a subir el dólar después de este aumento, nuevamente habrá otro. Es una carrera que no termina nunca. Pero los únicos perdedores siempre son los consumidores.
Entonces, ¿cuál es el motivo concreto de este aumento?
El motivo es la mera especulación. No es como si el dólar hubiera pegado un salto como sucedió después de las paso, el combustible tampoco subió y está relativamente todo calmo. Pero, “por las dudas” empiezan a subir. Pienso que si gana Fernández, el dólar va a subir y quiere decir que vamos a volver a recibir nuevos aumentos. Es lo que siempre sucede en la Argentina, las actualizaciones de los sueldos siempre son menores que la de los precios.
Ante esto, ¿Qué puede hacer el consumidor?
Pues el consumidor solo puede tratar de limitarse con los gastos para no tener que estar preocupados por los pagos de las tarjetas de crédito, no endeudarse. Las compras con tarjeta de crédito a cuotas es un buen negocio siempre y cuando se llegue a pagar los totales de la tarjeta y no los mínimos porque va a generar una deuda. Comprar a 12 cuotas sin interés es la única manera de ganarle a la inflación. Pienso que gane quien gane, vienen tiempos difíciles y acá el estado nunca se achica, el que se tiene que achicar, siempre, es el consumidor, el asalariado, el que está en relación de dependencia.
Hay 23 millones de personas que reciben un cheque del estado y somos 8 millones los que aportamos para esos 23 millones. Debería ser al revés, 23 millones los que trabajen y aporten y 8 millones reciban el cheque del estado, en el peor de los casos.
¿Cuál es su percepción sobre la suba de impuestos?
El aumentar impuestos es la única variable de ajuste que tiene el político. Si de cada 10 empresas que salen a la calle, se funden 8, es evidente que no es una cuestión de mala suerte ni de inteligencia por parte del que abre un negocio u empresa si no que es por culpa de la cantidad de impuestos que tenemos, y eso genera una cadena que termina siendo muy negativa.
¿Y sobre la falta de trabajo?
Vinieron al país cerca de 2 millones de venezolanos y todos tienen trabajo. Y hay 3 generaciones de “vagos” que no tienen trabajo y te cortan la calle porque no consiguen trabajo, pero estos 2 millones de venezolanos si lo tienen. Es algo llamativo. Lo digo sin tintes políticos. Hace 30 años que tenemos gente que reciben cheques del estado y protestan y le joden la vida a otro montón de gente cuando cortan la ruta, como pasa cerca del Zaimán, que el trabajador que tiene que ir a su casa, bajarse del colectivo, caminar y tomar otro colectivo, para poder llegar porque. En medio de eso hay 20 que están protestando. ¿Por qué yo, con mis impuestos, tengo que pagarle a esos 20 vagos que no quieren trabajar?. Nosotros no somos culpables, y me enferma seguir pagando impuestos para mantener a gente que podría trabajar, pero que no trabaja. Devolvamos los 2 millones de venezolanos, que no son argentinos, y démosle trabajos a los argentinos. Pero el problema es que los argentinos no quieren trabajar.
¿Cuál es, para usted, el debate que se debería dar entre empres, estado y sector trabajador?
Lo que yo veo, es que no se puede seguir de esta forma. El político solo está para administrar fondos ajenos pero los administra mal. No tenemos mejores resultados que antes. Es una cuestión de matemática básica porque no puede salir más de lo que entra y en Argentina, sale más de lo que entra. Le podemos echar la culpa a Macri, Cristina, De la Rúa, Alfonsín pero el estado está tan grande que sale más de lo que entra. Sea quien sea el político que esté, que nos vaya a gobernar, tiene un problema estructural.
Como última pregunta, este bono de 5 mil pesos, ¿están en condiciones las empresas de Posadas para enfrentarlo?
Hay muchísimas empresas que no están en condiciones, tengo colegas que fueron al banco a pedir un crédito para pagar los sueldos. Eso es como una sentencia de muerte. Hay un montón de PyMES que están pasando por esta situación financiera, que es muy compleja. Antes, en muchos casos, ibas al banco y te podías “apalancar” con el banco, cosa que hoy ya no se puede hacer. No podes pedir un crédito al banco, tu proveedor ya no te financia porque sabe que todo está muy trastocado y, en cualquier momento, hasta el mismo proveedor quiebra. Es toda la cadena la que está muy resentida. Entonces, hacerse cargo del bono del cual no estoy en contra, es algo difícil de asumir para las empresas.