Hoy te proponemos anexarle una tercera parte a la frase “Dime con quién andas y te diré quién eres”. Según los estudios realizados por el profesor de neurociencias y negocios Moran Cerf la frase debería ser “Dime con quién andas y te diré quién eres y cuán feliz serás”, porque una de las claves para lograr la felicidad es elegir correctamente a las personas que nos rodean.
Por más de 10 años, Cerf ha investigado cómo reaccionan los cerebros de las personas cuando reciben distintos estímulos. Es así que, utilizando electroencefalogramas, descubrió que cuando las personas pasan tiempo juntas, sus ondas cerebrales comienzan a parecerse. «Dos personas que ven las mismas películas, los mismos libros, que comparten las mismas experiencias y que además solo hablan entre ellos, después de dos semanas, comienzan a mostrar patrones comunes a nivel de lenguaje, emociones y hasta puntos de vista».
Dos de sus estudios podrían ser claves para encontrar el camino a la tan anhelada felicidad que todos buscamos:
- Por un lado, luego de exponer a diferentes personas a determinados trailers de películas, Cerf pudo comprobar que quienes miraron los mismos audiovisuales generaron patrones similares de actividad en sus cerebros, en una especie de «sincronía eléctrica”. De la misma forma, él afirma que al compartir mucho tiempo con alguien se produce una especie de alineamiento entre los dos cerebros. Es por ello que, en primer lugar, Cerf nos invita a elegir correctamente las personas que nos rodean. «Las personas cercanas a ti tienen un impacto en la manera en que te relacionas con la realidad más allá de lo que puedes percibir o explicar. Y uno de los efectos es que te vuelves parecido. (…) Si eliges una mala pareja y pasas 10 años con esa persona, la decisión va a tener un impacto significativo en tu vida», explica el neurocientífico.
- Por otro lado, Cerf estudió cómo nuestras elecciones y la forma en que las recordamos afectan el nivel de satisfacción personal que sentimos. En este sentido, dice que algunas personas tienen una gran habilidad para inventar narrativas o contarse historias positivas sobre las decisiones que han tomado. «Hay personas que han tenido experiencias muy difíciles pero tienen esa increíble habilidad de usar su cerebro para replantearse o reinterpretarlas”. Ahora bien, ¿es posible entrenar el cerebro para eso? «Es difícil empezar a reinterpretar la realidad de una manera cuando no lo has hecho antes de ese modo. La herramienta más directa es rodearse de personas que tienen esa habilidad», dice Cerf. «Si pasas tiempo con ellos vas a empezar a sentirte más satisfecho. Vas a terminar viendo el mundo de una manera parecida», agrega. «Es algo que va a ocurrir de todas maneras, no tienes que hacerlo conscientemente. Esa es la ventaja de la alineación cerebral».