A través de la resolución 144/18, el Colegio Médico de Misiones fijó el valor de la consulta en 715 pesos. Así lo informó Luis Flores, presidente de la entidad.
Esta resolución también resalta la diferencia entre el valor de la consulta diurna: $715, y la nocturna: $975.
En tanto, según recomendó el Colegio Médico de Misiones, el valor de la consulta diurna de los especialistas asciende a 988 pesos y 1183 pesos la nocturna. También la visita del médico a domicilio tiene montos diferenciales: 1079 pesos (diurna), 1183 pesos (nocturna); 1352 pesos si es un especialista que asiste por la tarde a un domicilio y 1430 pesos si un especialista visita al paciente por la noche.
Flores reconoció que se trata de una cifra que toma como referencia un 30 por ciento de inflación pero a su vez es algo simbólico «ya que las obras sociales pagan lo que quieren y cuando quieren». Indicó que es potestad del Colegio fijar un monto anual a pesar de que en la gran mayoría de los casos no se alcanza dicha cifra.
“La realidad es que cada obra social paga como quiere, lo nuestro no es más que un valor enunciativo porque el Colegio debe decir cuánto debe ganar el médico de acuerdo a los costos, sus estudios, la secretaria y los gastos fijos. Hoy el pago más alto por la consulta promedia los 400 pesos, de ahí para abajo. Algunas apenas pasan los 100 pesos. Cada obra social fija los honorarios que quiere en los tiempos que quiere. Nosotros no tenemos paritarias, por lo tanto no tenemos ni voz ni voto. Al menos pedimos que se respeten los tiempos para el pago”, añadió.
Según datos del ente que agrupa a los médicos misioneros las obras sociales que mejor pagan por consulta (sin especialidad) son Osde y Ospea, que le asignan un valor de 400 pesos por consulta.
En ese marco, el titular del Colegio Médico indicó que es importante fijar los honorarios, que son usados por los médicos como base, pese a que las obras sociales no tienen la obligación de cumplir gracias a una ley de desregulación económica sancionada en la época del gobierno de Carlos Menem en 1991. «Fijar honorarios éticos apunta a que la población sepa cuanto vale el trabajo del médico», indicó.