La razón es económica ya que la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA) realizó la propuesta para que las pymes comerciales e industriales incrementen sus ventas superada la etapa de inactividad generada por la cuarentena.
Pedro Bergaglio, vicepresidente de CGERA y dirigente de la Cámara Argentina del Sweater sostuvo que más allá de la cuestión meramente comercial, el Día del Padre representa un momento de encuentro entre las familias argentinas, que podría ser disfrutado plenamente con la postergación de su celebración.
“Además, tenemos los negocios cerrados y es probable que esta situación continúe en el Área Metropolitana de Buenos Aires por un tiempo. Y teniendo en cuenta que el regalo habitual para los padres son camisas, corbatas, sueters, o zapatos, nos parece prudente trasladar el festejo”, agregó.
Horacio Moschetto, también vice de CGERA y referente de la Cámara de la Industria del Calzado, aseguró que este sector está de acuerdo con el traspaso del Día del Padre al 19 de julio.
“Con la incipiente puesta en marcha de las fábricas de calzado, nos daría tiempo para empezar a producir parte de las colecciones de hombre para la temporada de invierno”, dijo el dirigente y agregó que el Día del Padre es importante para la reunión de las familias y también para los fabricantes de zapatos de hombre.
Fuente: Agencia de Noticias NA