Rituales y supersticiones: cómo empezar el año con el pie derecho

Más allá de que nuestro año haya sido bueno, regular o malo, siempre deseamos que el próximo sea mejor. Para  ello existen algunos  mitos y costumbres, que se han transmitido de generación en generación, que recomiendan seguir algunas normas para recibir el nuevo  año con “el pie derecho”. Se dice que lo que hagamos durante las primeras 24 horas del nuevo año marcará cómo se desarrollará ¿Estarías dispuesto a seguir los siguientes rituales?

Comer 12 uvas: es una tradición española que suele ser replicada en la Argentina comiendo 12 pasas de uva. Algunos dicen que representan los meses que dejamos atrás, otros los que vienen. Sea por la razón que sea hay que pedir un deseo por cada uva que comamos.

Usar una bombacha rosa: regalar o que te regalen una bombacha rosa es una tradición navideña bien argentina inspirada en la época victoriana cuando la moda de las cortes en Navidad imponía el rosa en vestidos y lencería. El rosa tiene el propósito de atraer prosperidad y buena suerte; y de paso deshacernos de alguna bombacha deshilachada.

Llevar algo rojo: Tradicionalmente el rojo se ha relacionado con la prosperidad, el amor y la pasión, por lo que es habitual llevar ropa interior o algún otro complemento de este color en el paso de un año a otro. La tradición manda también que una vez usadas las prendas sean quemadas para terminar de conjurar a la buena suerte. En España tanto hombres como mujeres acostumbran usar una prenda íntima de color rojo cuando se busca conjurar el amor y amarillo para el éxito en las finanzas.

Besos a medianoche: Si deseas encontrar novia deberás besar a una mujer ni bien comenzado el nuevo año. Si por el contario quieres una pareja masculina, besa al hombre más próximo a tí. Y si ya tienes pareja, deberás besarla a medianoche para afianzar el amor.

Empezar con el pie derecho: el ritual dice que existen dos formas de comenzar el año con el pie derecho: pisar fuerte con el pie derecho justo después del cambio de año; o bien, salir afuera del hogar y volver a ingresar pisando primero con el pie derecho.

Todos con valijas: ¿A quién no le gustaría viajar más el próximo año? En varios países de Latinoamérica se cree que una vez pasadas las 00 horas se debe salir a la calle con una valija como si se estuviese por viajar. Hay algunas versiones que dicen que se debe correr con la maleta a cuestas y otras que dicen que simplemente se debe dar un paseo con la misma, pero lo que es seguro es que si ves a alguien en año nuevo en medio de la noche con una valija no es porque lo hayan echado de su casa.

Comer donas azucaradas: esta es una costumbre holandesa para tomar conciencia de la circularidad del tiempo, es decir que no hay ni principio ni final. Por otro lado, se cree que el azúcar atrae la dulzura y aleja las amarguras.

Momento de limpieza: para empezar un año con nuevas vibras primero hay que limpiar y ordenar el hogar. Eliminar todo lo que no usamos es el mejor consejo para dar lugar a que resurjan cosas nuevas. Una modalidad para terminar con lo malo es destruirlo simbólicamente dentro del fuego purificador. En Perú, Honduras y Ecuador queman prendas y muebles que simbolizan un mal recuerdo. En Colombia se escribe en papelitos lo que se desea alejar de la vida y se los guarda en un muñeco al que se prende fuego.

Vestirse de blanco: el blanco es el color de la pureza y la renovación. Es el color por excelencia de los rituales de iniciación: bautismo, comunión, casamientos, etc; por eso se dice que es capaz de absorber las buenas vibraciones del año entrante.

Encender velas: Su objetivo es agradecer, pedir y honrar la buena fortuna. Las supersticiones asocian cada color con un tipo de fortuna concreto. Así, el azul atrae la paz, el amarillo la abundancia, el rojo la pasión, el verde la salud, el blanco la claridad y el naranja la inteligencia creadora. Recibir el nuevo año con la casa iluminada con una vela de alguno de esos tonos debería asegurar que su atributo se instale en el hogar.

Con la billetera y la casa llena: dicen los supersticiosos que jamas debes empezar el año sin dinero en el bolsillo o en la cartera; y que nunca debes comenzarlo solo; porque sino te perseguirá la soledad y la pobreza.

Ofrendas en el mar: y para aquellos que tienen la suerte de recibir el año frente al mar, no deben olvidarse de pedir favores a Iemanjá, la diosa del mar. En Río de Janeiro la fiesta de Iemanjá coincide con el 1 de enero, donde la gente entra al mar y arroja ofrendas florales: gladiolos blancos para pedir paz, rojos para el amor y amarillos para el dinero.

¡Qué comiencen un feliz y próspero 2018!

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