El novedoso dispositivo fue presentado recientemente en el Concurso Nacional de Innovaciones, denominado INNOVAR 2019.
Se trata de la obereña, Vanessa Kunz, quien diseñó una cápsula a base de semilla de moringa que permite a cualquier persona purificar el agua antes de ingerirla, y en cualquier circunstancia.
Vanessa contó que tiene una planta de Moringa en su casa y a partir de allí surgió la idea de investigar sus propiedades y descubrió que «hay comunidades aborígenes que utilizan las semillas para purificar el agua desde hace muchísimos años», señaló.
“Quince gramos de moringa -procesadas como polvo- tienen la capacidad de purificar 25 litros de agua. Y la intención es que la cápsula sea recargable, no desechable», señaló.
Kunz creó un prototipo funcional y en estos momentos está investigando la manera de patentarlo. El invento apunta a deportistas extremos y como kits de supervivencia ante desastres climáticos.
Fuente: Canal 12