Sandra Ozuna, Directora de la Unidad de Cibercrimen, y el Oficial Ayudante de la Policía de Misiones y especialista en Informática, Leonardo Micheli, pasaron por P16 Radio donde hablaron sobre todo lo referente al cibercrimen, sexting, grooming, etc. También brindaron herramientas y consejos para los padres al momento de identificar abusos mediante las redes y poder actuar de forma correcta.
“Hoy se vive a través de lo que son las redes sociales, hoy se vive a través de internet”, señalaron los especialistas y agregaron que para la gente “es más importante mostrar, que vivir”.
En este constante proceso de “mostrar” la vida cotidiana, los especialistas remarcan que estas prácticas pueden desencadenar en una problemática que puede llevar a las personas, y sobre todo a los adolescentes, a sufrir depresión porque muchas conductas se ven afectadas por los likes o los comentarios que reciben en las redes sociales.
-¿Ustedes dan charlas en los colegios?
Hace un par de años hicimos un congreso con distintas disciplinas y, a partir de ese evento, tuvo mucha repercusión la problemática de todo lo que son los delitos informáticos y ahí empezamos a recorrer colegios en toda la provincia.
-¿Las instituciones perciben estas problemáticas?
Sí. El ciberbullying es hoy la problemática más grande que existe en todos los colegios, se volvió común. Es algo que se trasladó del bullying común de nuestra época, donde todos fuimos causa y causante en algún momento. Hoy día se trasladó a un mundo virtual.
Básicamente, lo que decimos es que hoy uno está todo el tiempo en las redes sociales. Todo es un mundo virtual, lo primero que se hace es mirar el celular y también lo último que se hace. Entonces, imaginen ese bullying que sufríamos nosotros en 4 o 5 horas en la secundaria, hoy potenciando las 24 horas.
La globalización llegó para todos, para cosas buenas y malas. Hoy se hace ciberbullying a personas que ni se conocen, se hacen grupos en las redes sociales para hacer bullying. Eso es uno de los temas de las charlas, donde les mostramos a los mismos chicos los grupos que han creado para hablar de otros o hacer escraches, le decimos “miren, ustedes hicieron los grupos” y las caras de ellos es de sorpresa.
-Hoy desde las redes se puede saber casi todo de otra persona, qué comió, cómo está, fotos con amigos…
Esa es la faceta buena de la cuestión tecnológica. Pero la única manera de revertir lo malo es hablando con los chicos y con los padres porque estos tienen que saber en qué andan sus hijos.
Nosotros, siempre que hablamos de uno de los delitos, que hoy es ley, que es el grooming decimos lo mismo, los chicos en los colegios saben más de qué es el grooming que los padres. Los padres no tienen conocimiento, pero los chicos saben.
El grooming es cuando un adulto se contacta con un menor por medio de las redes sociales haciéndose pasar por un perfil falso, ya sea un chico o lo que fuere, y tiene contacto con este menor con el objetivo de llegar al abuso o a un secuestro. Los groomers son personas que se pasan meses y meses hablando con un chico, haciéndose pasar por otro.
-Meses sin que el chico pueda contar esa situación también o sin que el padre la perciba…
Ahí entra a jugar el diálogo porque ¿cómo un papá o una mamá no se va a dar cuenta que un niño está todo el tiempo con el celu, todo el tiempo con la compu, atento o pendiente, que se esconde para hablar?, son pequeñas alarmas que nos deberían hacer ruido como papás.
La idea de hablar con los padres es que ellos entiendan, porque muchas veces los padres de mayor edad les pasa de decir que ¿cómo va a hacer el menor para conocer algo o a alguien por las redes?, pero hoy todo pasa por las redes, se conocen personas virtualmente, se hacen amigos, se hacen parejas. Lo hacemos los grandes, ¡cómo no lo van a hacer los chicos que nacieron con esto!, nosotros vivimos otra realidad, sabemos que no había pero ellos no, ellos nacieron con las redes sociales. Toda esta realidad de ellos es virtual.
-¿Y qué pueden hacer los padres?
Limitar, controlar, ganar o competir con internet no se pude, hay que acompañar a los chicos. Lo primero que tienen que hacer es saber, porque yo no puedo explicar algo que no sé. Hay que saber qué redes sociales utilizan los hijos y con quienes hablan.
Además, hay que ser abiertos y entender que todos podemos ser víctimas del grooming, del cyberbullying, del sexting. Son todas cuestiones que nos tocan hoy en esta realidad virtual.
-¿El sexting tiene edades?
No, el sexting no está tipificado como un delito y es una problemática muy abierta, pero podemos decir que una foto compartida entre una pareja de adolescentes menores no califica como delito, el problema surge cuando un adulto accede a esas fotos, ahí podríamos estar hablando de lo que es pornografía infantil.
-Y si en esa pareja uno se enoja, se separan y empieza a hacer circular estas fotos, ¿hay alguna manera de accionar o no?
Siempre hay una manera de accionar, por eso hago esta diferenciación. Si es en el ámbito privado, de una pareja, no hay delito al intercambiar fotos. Al igual que los adultos, si estos comparten fotos no hay delito.
Es importante hacerle entender a los padres que es común el sexting, el envío de imágenes íntimas, entre adolescentes. Y hay un gran porcentaje de adultos que también lo hacen.
Cuando hablamos de esto, los padres nos dicen “¡cómo se van a mandar fotos!” y siempre les digo que la diferencia entre los chicos de hoy con los de nuestra época era la falta de recursos, porque si teníamos lo hubiésemos hecho y hubiésemos mandado fotos porque es parte de la adolescencia.
A parte de todo esto, hay que explicarles el por qué es peligroso. ¿Por qué es peligroso?, porque está comprobado que más del 95% de las personas tienen al menos un seguidor que no conoce, mínimo. Todos tenemos al menos una persona que nos sigue, que nosotros no sabemos quién es. Hay chicos que tienen hasta 20 mil seguidores, de ahí viene el peligro.
Fijate el detalle, para el rango etario de las personas que nosotros visitamos cuando hacemos las charlas, el adolescente, el Facebook no existe más, quedó relegado para los adultos.
Cuando nosotros, los adultos, terminamos de aprender a usar bien el Facebook, aparecieron 10 redes sociales más.