La crisis golpea fuerte en diversos sectores lo que obliga a buscar otras formas de ingreso para poder llenar un bolsillo que parece apretarse cada vez más.
En ese marco, Alberto Fusté Padrós, delegado regional del Sindicato de Vendedores Ambulantes de la República Argentina, (SIVARA) contó que aumentó un 30 por ciento la venta ambulante, «fundamentalmente de gente que quedó sin trabajo en el último tiempo», afirmó.
También informó que para estar habilitado como vendedor ambulante por la Municipalidad hay que ser desocupado. Además agregó que por más que no esté habilitada la venta ambulante, es el único ingreso de estas personas.
Aunque también resaltó que se suelen dar casos de mujeres que trabajan en casas de familia con un sueldo muy bajo y los fines de semanas trabajan como vendedoras ambulantes para tener un ingreso extra y poder dar de comer a sus hijos.
Por su parte, Javier Suárez, director de Inspección y Servicios de la Municipalidad de Posadas, indicó que «hasta el momento, consignamos un 30 por ciento más de vendedores en el 2018”.
Este porcentaje significa un total de 1.000 personas que están autorizadas a realizar este tipo de ventas en Posadas, inscriptas para brindar ese servicio en las calles de la ciudad.
La caída laboral afectó a diversos rubros, desde la construcción hasta la industria a lo largo de todo el país.
Fuente: Radio Red Ciudadana /El Territorio